Valencia, 04-02-2001.

Estado, Carabobo.

CASOS DE TORTURAS EN VALENCIA VENEZUELA

WIKILEAKS HELP ELECTRONIC HARASSMENT CASES OF VENEZUELA.

Crímenes de Lesa Humanidad – Torturas en Venezuela Universidad de Carabobo Rectora Jessy Divo de Romero Vicerrector Academico Ulices Rojas Vicerrector Administrativo Jose Angel Ferreira– La fiscal de Valencia Venezuela Tiene 5 Casos de Electronic Harassment Cauterizaciones Cerebrales  Voice in to Skull.

 

En estos Casos Actúan Agencia de Inteligencia y Organizaciones de Estudios de la Raza Humana en La Haya, FRANCIA, CHINAS, COREANAS y JAPONESAS.

 

El Periodista OPENHAIMER tiene distintos casos que puede ver al llamarlo.

La denuncia que usted puede conseguir en la fiscalía de Valencia, Venezuela fue enviada a tribunales internacionales como los tribunales de La Haya y al guna policías internacionales, como la INTERPOL, esta denuncia que puede ser considerada desde el punto de vista legal como una denuncia que es realizada en base a argumento inexistentes, fue explicada en medios de comunicación y ninguna institución ha realizado ninguna investigación.

Este tipo de denuncias cuando no son respondidas por ninguna institución legal desde el punto de vista legal comprueba este tipo de crímenes.

En la policía internacional INTERPOL la respuesta no se consigue usted por esta comunicación puede hacer exactamente lo mismo y vera que ninguna policía u organización.

Realizara ningún proceso legal……..

 

                          http://www.andresoppenheimer.com/contacto/                        

http://www.interpol.int/es/Contacte-con-INTERPOL

http://www.cicpc.gov.ve/directiva-del-cicpc

http://www.animalistas.com/Directorio.htm

http://www.fucema.org.ar/old/fucema/proyectos/enb.htm

 

rector@uc.edu.ve, sugiere@uc.edu.ve, viceacuc@uc.edu.ve, viceacuc@uc.edu.ve, viceaduc@uc.edu.ve, secreuc@uc.edu.ve , secreuc@uc.edu.ve, decfacde@uc.edu.ve, decfaces@uc.edu.ve, di@uc.edu.ve , dir-rrhh@uc.edu.ve, actualidad105produccion@gmail.com, elchiguirebipolar@gmail.com, zoilabastidas@ploptv.net, contacto@sinflash.biz

 

cicpccasoValencia@gmail.com

 

Denuncia de Acoso Electrónico Torturas Mentales Acoso Electrónico y Voice to Skull.

 

En esta primera comunicación quisiera explicarles un poco acerca de la intención de presentar este caso. Para introducir a los abogados en estos tipos violaciones a los derechos humanos,  Al recolectar información acerca de cómo algunas organizaciones de estudio de la raza humana realizan actividades criminales de acoso, deterioro genético, manipulaciones y daños biológicos.

Como parte de la información que se presenta para que sea examinada se tienen archivos, libros de agencias, organizaciones de estudio de la raza humana, grabaciones, programas de televisión, precedentes legales, metodologías de investigación para la determinación de tecnologías, Discovery Chanel y History Chanel.

Para completar las informaciones se archivaron decenas de miles de casos en algunos países del mundo, en todos los casos se presentan características similares en términos de acoso electrónico y casos de voice in to sckull, algunos sujetos presentan sensaciones de cauterización en zonas del cerebro, acompañadas de sensaciones de perdida de la memoria, sensaciones asociadas a estimulaciones que producen algunos movimientos involuntarios, casi imperceptibles en extremidades, los sujetos comentan en algunos casos que perciben voces, pero el contenido de las voces sigue los mismo patrones desde el punto de vista estadístico en cuanto al contenido. En casos de Voice in to Skull, los sujetos que presentan este tipo de estimulaciones nano voltaicas en los centros de procesamiento auditivo comentan tener la percepción de voces, muchas de las voces presentan contenidos alfanuméricos, que desde el punto de vista de psicología criminal, pueden ser usada para comprender las características de cada organización, pero no solo las características además los fines que calculan para conseguir objetivos diversos.

Todos los casos comentan que las voces que perciben, son producidas por organizaciones, de estudio de la raza humana, agencias de inteligencia y organizaciones con fines diversos.

Algunos de los fines que se han logrado determinar incluyen la de lograr fines, económicos, extracción de información, seguridad de estado, torturas, investigaciones genéticas, comercializaciones de material biológico y hurtos.

Para la valoración legal de este tipo de casos en los que las leyes que han sido diseñadas en el estado, la tipificación de delitos de este tipo no ha sido incluida ya que los daños biológicos que se producen por la acción de este  tipo de tecnologías, son diversos y en la consideración internacional se encuentran penados.

En la corte Internacional de La Haya, en la cual se han realizados juicios en los cuales casos de genocidios y crímenes por segregación racial establecen las  penalizaciones para crímenes que por tener un comparación con crímenes que se estipulan en leyes del estado en que se producen los crímenes, pueden ser resueltos, de forma que la justica internacional diseña leyes que de forma general en los países que se someten, cumplen para la garantía de crímenes que pueden ser considerados sobre sistemas poblacionales extensos.

La inclusión comprobable de tecnologías en medicamentos o alimentos, permite la posibilidad de estimulación celular, deterioro del ADN, cambio metabólico y daños biológicos.

En la concepción del daño biológico podemos establecer que este deterioro se realiza por la utilización de campos electro magnéticos, estos campos emitidos hacia las células puede alterar la estructura del ADN, pero al tener informaciones sobre la existencia de nanotecnología, esta puede tener la posibilidad de captar las señales provenientes desde emanadores, una de las consideraciones mas impotartantes sobre estas tecnologías es la posibilidad de en términos (hardware) de convertir estas transmisiones en descargas nano voltaicas y además producir campos con frecuencias altas que afectan directamente la estructura y la afinidad atómica de le la molécula de ADN y de otras moléculas químicas , produciendo vibraciones en la estructura de la molécula que cambian la configuración de la misma, cuando tenemos una molécula en la cual los átomos se encuentran unidos y estos son sometidos a vibraciones que afectan su estructura, algunos átomos que la integran, por fricciones entre los campos y la atracción de los átomos pueden cambiar la configuración de la molécula, pero al hablar sobre ADN la molécula la cual posee estructuras alargadas puede cambiar en la configuración provocando que algunos átomos se desajusten, cambie o mute el código. Produciéndose algunas variaciones genéticas, por cambios estructurales en la molécula de ADN. En términos de la molécula de ADN la aparición de enfermedades de origen genético o la mutación del código por activación de genes, puede ser acelerada incluso desactivada, ya que la posibilidad de que nano partículas cuyo tamaño tiene la posibilidad de ingresar al núcleo para descifrar información por las teorías descritas al final, la posibilidad de emitir campos electromagnéticos a estas escalas abre la posibilidad de que por fricción de campos pueda ser descifrada información de una molécula de ADN.

Al utilizar estas tecnologías podemos creer que la nanotecnología pudiesen tener la posibilidad de contener procesadores internos ya que la medida nano, es una medida que para poder ser observada, necesita tecnología de resolución  electrónica que solo puede ser obtenida por microscopios de fuerza atómica o microscopios laser. Para poder observar procesadores que se en cargan de tomar los impulsos eléctrico y generar frecuencias internas que le permitan a la nano partícula captar la información y luego enviarla desde el cuerpo hacia antenas tipo célula, se necesitarían aparatos que tengan la posibilidad de manipular estas estructuras a escalas manométricas, la medida por explicación es 1/1.000.000 milímetros.

Solo microscopios de fuerza atómicos y microscopios laser, permiten la observación de estas tecnologías en muestras que se podrían realizar en alimentos y medicamentos, para esto se proponen algunos laboratorios que se encuentran en el país, La Universidad Central de Venezuela y El IVIC, la realización de estas observaciones solo se debe realizar con  metodologías simples utilizada en criminalística, el proceso no es complejo, pero las muestras son extensas, en cuento a la posibilidad de encontrar alimentos y medicamentos que contengan estas estructuras nanotecnológicas.

Para la valoración de casos en los cuales personas presentan distintos tipos de síntomas, que en el conocimiento medico o psiquiátrico pudiese ser interpretado como enfermedades o patologías, tenemos algunas personas que presentan síntomas que en el caso necesitan estudiar para la determinación alteraciones y daños biológicos. Las valoraciones pueden ser realizadas por distintos tipos de metodologías ya que en casi todos los casos estas personas presentan los mismos síntomas.

Los síntomas que presentan y que en ocasiones médicos y profesionales pudiesen diagnosticar como enfermedades o patologías debieran ser observados con  métodos distintos a los métodos utilizados por la medicina y psiquiatría clásica. Las patologías psiquiátricas establecen como la psique pueden presentar distintos tipos de manifestaciones atendiendo a diferentes precepciones, estímulos neuronales, y deterioros neuronales. En casos de acoso electrónico los impulsos que generan este tipo de tecnoligias pueden manifestar distinotos tipos de síntomas que un spicoanalista o psiquiatra, como profesional pudiese identificar como patologías, pero en los casos estudiados en distintos lugares del mundo se expone como estos sujetos tartán sus síntomas con psicólogos y psiquiatras ye estos, con conocimientos adicionales diagnostican síntomas que nos forman parte de la psiquiatría.

Desde el punto de vista medico, existe la posibilidad de que la conclusión acerca de los síntomas presentados  por los pacientes que son tratados por la posible identificación de enfermedades se produzca por con la utilización de procedimientos, metodologías y conocimiento, sin utilizar las informaciones que pudiesen completar el diagnostico sobre una persona que sufre de crímenes.

Desde el punto de vista psiquiátrico, la identificación de patologías que clásicamente se realiza a través la entrevista, puede no ser la adecuada ya que la sintomatología de los casos puede incluir, desde síntomas neurológicos que se pueden interpreta como activadores de patologías psiquiátricas, como esquizofrenia, psicosis, bipolaridad, doble personalidad, problemas motrices, neurosis, psicopatías y distintas patologías psiquiátricas.

Para completar las informaciones se archivaron decenas de miles de casos en algunos países del mundo, Latino América, Norte América, Europa, y Asia, en todos los casos se presentan características similares en términos de Acoso Electrónico y casos de Voice in to Sckull, los sujetos comentan que perciben voces, pero el contenido de las voces sigue los mismo patrones desde el punto de vista estadístico y matemáticos, la creación de algoritmos para realizar distintos tipos de fines, como eventos, desplazamientos poblacionales y la posibilidad de manipular sujetos con fines no legales. Todos los casos comentan que las voces que perciben, son producidas por organizaciones, de estudio de la raza humana, agencias de inteligencia y organizaciones con fines diversos.

En la explicación de algunos casos las personas, que sufren de estimulaciones, los aspectos mas notorios son percepción de voces, pero estas voces tienen un contenido que al ser registrado y luego ser estudiado, no pareciera ser un contenido en base a leguaje de comunicación normal, el estudio lleva a concluir que estas voces se encuentran creadas   desde el punto de vista de códigos alfa numéricos, estos códigos se encuentran siendo transmitidos y en casos se pueden identificar, como algunas organizaciones realizan distintos tipos de actividades.

Al comentar como estas actividades se realizan, la transmisión de datos puede afectar el desplazamiento y funcionamiento de sistemas que normalmente consideramos estados, la afectación del sistema por influencias tecnológicas, crea manipulaciones, estimulaciones y cambios de percepciones incluso cambios de desplazamientos para lograr fines singulares,  los fines se teorizan según las necesidades de los estados.

Las necesidades de lograr efectos sobre grupos poblacionales, incluyen asuntos de seguridad nacional, concepciones políticas, intereses económicos y fines que normalmente no conocemos ya que en sistemas de este tipo las posibilidades incluyen tener necesidades y cumplirlas por la posibilidad de tener mejores condiciones.

Desde el punto de vista de la criminalística, la posibilidad de conclusión o veredicto a cerca de casos de personas que han cometido crímenes, en la concepción del código orgánico procesal penal, pudiese tener distintas interpretaciones ya que la posibilidad de producir descargas nano voltaicas, permite la posibilidad de realizar manipulaciones celulares, incluso cambiar su funcionamiento, ya que en el contenido celular, el metabolismos, se basa en procesos complejos, pero al considerar el funcionamiento de la célula desde un punto de vista químico en CÉLULAS NERVIOSAS, las descargas nano voltaicas pueden alterar el funcionamiento del cerebro, como la memoria a corto mediano y largo plazo, centros procesamiento visual, centros motrices, sensaciones y percepciones.

En Referencia a Daños en el Hipotálamo.

Para la explicación de detrerioros en casos de acoso electrónicos y cauterizaciones, podemos explicar lo siguiente:

El hipotalamo controla diferentes procesos del cuerpo estos procesos comprenden: funciones que teienen  que ver con la percepcion y estimulos:

conexiones aferentes de hipotálamo: olfativas y del sistema límbico, funciones somáticas que llegan al hipotálamo como colaterales de los sistemas lemniscales, memoria aferencias corticales que llegan al hipotálamo directamente desde la corteza frontal, aferencias provenientes del hipocampo, vía Fórnix-núcleos mamilares,

 

Aspectos Anatomofisiológicos

El tálamo ocupa aproximadamente el 80% de la región diencefálica medial. El término ‘tálamo’ deriva de la palabra griega thalamos, que significa ‘cámara interna’ o ‘lecho nupcial’. Galeno (130-200 d. C.) dio este nombre a las ‘cámaras’ ubicadas en la base del cerebro. Embriológicamente, deriva de la vesícula diencefálica, procedente a su vez de la vesícula prosencefálica: tras formarse los dos telencéfalos, se delimita una zona central que dará lugar al futuro diencéfalo. El tálamo tiene forma ovalada; es una estructura par y más o

menos simétrica con relación a la línea media. En el ser humano,  cada tálamo mide cerca de 3 cm de largo (anteroposterior) y 1,5 cm de ancho en su punto más amplio [1]. Está atravesado por una banda de fibras mielínicas, la lámina medular interna, que corre a lo largo de la extensión rostrocaudal del mismo, adopta una distribución especial en el polo anterior en forma de Y, y divide al tálamo en grandes bloques anatomofuncionales. Esta lámina contiene fibras intratalámicas que conectan los diferentes núcleos del tálamo entre sí. Otra banda medulada, la lámina medular externa, forma el límite lateral del tálamo, medial a la cápsula interna. En el tálamo existen dos tipos de neuronas desde un punto

de vista funcional:

– Neuronas principales o de proyección (transmiten información fuera del tálamo), que representan cerca del 75% de la

población neuronal total.

– Interneuronas locales o de circuitos locales, que pueden recibir información de las mismas fuentes que las neuronas

principales, pero sólo entran en contacto con células talámicas que participan en la misma etapa de procesamiento.

Constituyen alrededor del 25%. Las neuronas principales envían sus axones a la corteza cerebral, donde liberan un neurotransmisor excitatorio (glutamato, generalmente) para activar las neuronas corticales. El glutamato y el aspartato son neurotransmisores excitatorios y están presentes en las terminaciones corticotalámicas y cerebelosas y en las neuronas de proyección talamocortical. Una excepción lo constituyen las aferencias subcorticales de los núcleos grises de la base, que son gabérgicas, inhibitorias. Las neuronas de los circuitos locales liberan ácido  (GABA) en las células de proyección para inhibirlas. Este neurotransmisor inhibitorio se localiza en las terminaciones que provienen del globo pálido, en las neuronas de los circuitos locales y en las de proyección del núcleo reticular y el cuerpo geniculado lateral. Son proyecciones gabérgicas las principales proyecciones del segmento palidal medial hacia el ventral anterior (parvocelular) y el ventral lateral (pars oralis) y las proyecciones de la parte reticular de la sustancia negra al núcleo ventral anterior (magnocelular) y dorsomedial (paralaminar). Estas aferencias desempeñan un papel fundamental en la función motora [2]. Las neuronas gabérgicas se han identificado en todas las láminas del cuerpo geniculado lateral y son más abundantes en las láminas 1 y 2 (magnocelulares). Las aferencias procedentes de las regiones subcorticales y de la corteza cerebral que se dirigen hasta los núcleos talámicos excitan (despolarizan) a las neuronas de proyección y las interneuronas locales de dichos núcleos. A su vez, las neuronas de los circuitos locales inhiben (hiperpolarizan) a las neuronas de proyección y el neurotransmisor que se utiliza es el GABA. Así, las aferencias hacia el tálamo influyen sobre las neuronas de proyección (talamocorticales) a través de dos vías: una excitatoria directa y una inhibitoria indirecta, por medio de las neuronas de los circuitos locales. Las neuronas de los circuitos locales modulan la actividad de las neuronas de proyección, que envían sus axones a los destinos extratalámicos. Además, las células de proyección envían una rama colateral a las neuronas del núcleo reticular talámico, que contienen el neurotransmisor inhibitorio GABA y actúan como neuronas de los circuitos locales. Las células del núcleo reticular talámico envían ramas axónicas a las neuronas de proyección y de los circuitos locales, por lo que ambas se inhiben.

La corteza cerebral, que recibió proyecciones aferentes excitatorias de las células talámicas de proyección envía axones excitatorios de regreso a todos los tipos celulares talámicos, por lo que las aferencias corticales activan tanto a las neuronas de proyección como a las inhibitorias de los circuitos

Locales y del núcleo reticular. De esta forma, el tálamo no sólo es un simple relevo de información entre los centros aferentes y la corteza, sino que es el encargado del procesamiento de la información, e influye por tanto sobre las funciones corticales.

Grupos Nucleares Talámicos.

El tálamo contiene una organización nuclear muy rica. Se han identificado hasta 50 núcleos talámicos [4], varios de los cuales son subdivisiones microscópicas. La nomenclatura de los núcleos talámicos es muy compleja, y en algunos casos se desconocen sus conexiones y el significado funcional de los más pequeños [2]. Se han propuesto varias clasificaciones de los diferentes núcleos que integran el tálamo basadas en una perspectiva evolutiva [5], características compartidas de conectividad de fibras y funciones [6], criterios citoarquitectónicos [7,8] y criterios anatomofuncionales de los diferentes núcleos talámicos (Tabla).

Conexiones Talamocorticales y Corticotalámicas.

La organización en el seno de la corteza cerebral de las proyecciones talamocorticales y corticotalámicas y las propiedades neurofisiológicas de las fibras que ascienden o descienden hacia o desde la corteza cerebral son la base de las complejas relaciones entre los diferentes núcleos talámicos y la corteza cerebral [9].

Fue Lorente de Nó [10] quien describió las aferencias talamocorticales como fibras talamocorticales específicas y fibras talamocorticales inespecíficas. Las primeras tienen su origen en los núcleos específicos del tálamo, forman sinapsis en la capa IV de la corteza y son portadoras de información de la sensibilidad general y especial (excepto la olfativa). Las segundas son fibras ascendentes con colaterales fundamentalmente a las capas I, II y VI. Estas vías inespecíficas están relacionadas con las vías talamocorticales difusas, procedentes de los núcleos de la línea media e intralaminares hacia el córtex cerebral [11,12] y

relacionados con los mecanismos de arousal (vigilancia). Hemos de señalar también que existen proyecciones recíprocas de todos los núcleos de relevo y de algunos núcleos de asociación que van desde el tálamo a la corteza y desde la corteza al tálamo, a través de la cápsula interna, denominadas ‘radiaciones talámicas’.

A pesar de que estas radiaciones establecen conexiones prácticamente con todas las partes de la corteza, la riqueza de las conexiones varía entre diferentes áreas corticales. Las más abundantes se dirigen hacia la circunvolución precentral y poscentral, el área calcarina de circunvolución de Heschl, la región parietal posterior y las partes adyacentes del lóbulo temporal [2]. Para finalizar este apartado dedicado a los aspectos anatomofisiológicos del tálamo, hemos de señalar que esta estructura cerebral está irrigada, fundamentalmente, por finas ramas de la arteria cerebral posterior (ACP), junto con ramas de la arteria carótida interna y de la arteria comunicante posterior. Las arterias talamoperforantes (arterias posteromediales o paramedianas), que se originan en las partes mediales de la ACP y en la parte terminal de la arteria basilar, irrigan la región medial del tálamo (territorio talámico medial), concretamente los núcleos intralaminares (núcleo centromediano y parafascicular), dorsomedial (parte dorsal), ventral lateral, ventral anterior, ventroposterolateral y ventroposteromedial [13,14]. Las ramas talamogeniculadas (arterias posterolaterales) de la ACP irrigan la mitad caudal del tálamo (territorio talámico posterolateral), que incluyen los siguientes, núcleos: ventroposterolateral, ventroposteromedial, cuerpos geniculados (lateral y medial), pulvinar, dorsomedial, lateral posterior y reticulares. La arteria comunicante posterior irriga el territorio talámico anterolateral a través de la rama tuberotalámica (polar, óptica): ventral anterior, ventral lateral, dorsomedial y anteroventral. La arteria carótida interna irriga el territorio talámico lateral a través de su arteria coroidea anterior: el cuerpo geniculado lateral, ventroposterolateral, pulvinar y reticulares. El territorio talámico posterior está irrigado por la arteria coroidea posterior; aporta los nutrientes necesarios al cuerpo geniculado lateral, pulvinar, dorsolateral, dorsomedial y anteroventral. El drenaje venoso cerebral depende de dos sistemas, el superficial y el profundo. El primero drena la corteza cerebral y la sustancia blanca subcortical, y en el segundo drenan el plexo coroideo, las regiones periventriculares, el diencéfalo y los nú- Tabla. Clasificación de los núcleos talámicos. Criterios de clasificación Principales núcleos talámicos. Perspectiva Arquitálamo: núcleos de la línea media, evolutiva [5] intralaminares y reticulares.

Paleotálamo: cuerpos geniculados, núcleos ventrales posteriores, de relevo cerebeloso y anteriores Neotálamo: núcleos mediales, laterodorsal, lateral posterior y ventral anterior Conexiones [6] Modalidad específica: núcleos ventroposterolateral,

ventroposteromedial, cuerpos geniculados, ventral lateral, ventral anterior, anterior y dorsolateral Multimodales asociativos: núcleo dorsomedial y complejo pulvinar-lateral posterior Inespecíficos y reticulares: núcleos intralaminares de la línea media y reticulares Función que Motores: núcleos ventral anterior y ventral desempeñan [6] lateral) Sensitivos: núcleos ventroposterolateral y ventroposteromedial y cuerpos geniculados Asociativos: núcleo dorso medial y complejo pulvinar-lateral posterior Inespecíficos y reticulares: núcleos intralaminares, de la línea media y reticulares Citoarquitectura [7,8] Grupo nuclear lateral: complejo ventroposterior, núcleos ventral lateral, ventral anterior y ventral medial

Grupo nuclear medial: núcleos intralaminares y núcleo dorsomedial.

Grupo nuclear posterior: complejo posterior, núcleos lateral posterior, pulvinar y Geniculados Grupo nuclear anterior: núcleos anteroventral.

Anteromedial, anterodorsal y lateral dorsal Núcleos reticulares.

Anatomofuncional Grupo nuclear anterior: núcleos anteroventral, anterodorsal y anteromedial Núcleo dorsomedial Grupo nuclear lateral: núcleos dorsolateral, lateral posterior, ventral anterior, ventral lateral, ventroposterolateral y ventroposteromedial Grupo nuclear posterior: pulvinar, cuerpos geniculados Núcleos de la línea media: paratenial, paraventricular, reuniens, romboide Núcleos intralaminares: centromediano, parafascicular, paracentral, central lateral y central medial Núcleos reticulares.

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REV NEUROL 2004; 38 (7): 687-693 689

 

El núcleo ventroposteromedial sirve de centro de relevo sensitivotalámico de la cabeza y la cara. Las eferencias de este núcleo se dirigen a través de la cápsula interna hasta la corteza somestésica primaria del lóbulo parietal.

A través de las proyecciones de esta zona talámica hacia zonas frontales (áreas 4, 8, 6, 44 y 45), el tálamo está involucrado en la sensopercepción de los movimientos.

El tálamo está implicado también en los mecanismos del dolor. Los principales núcleos de destino de los axones ascendentesn  para el dolor y la temperatura se encuentran en el núcleo ventral posterior. El ventroposteromedial y el ventroposterolateral reciben la mayor parte de estas aferencias. El ventroposteromedial recibe información nociceptiva desde la cara, y el ventroposterolateral, del resto del cuerpo. La disposición similar de los estímulos mecanosensitivos y nocivos es la responsable de los mecanismos discriminadores del dolor [15]. Los núcleos talámicos intralaminares, en cuanto al dolor se refiere, participan en la evocación de la respuesta desencadenada por un estímulo nocivo a través de las proyecciones que llegan a estos núcleos desde la formación reticular. Algunas modalidades sensitivas se perciben en el tálamo, hecho que se pone de manifiesto cuando existen lesiones o ablaciones.

de la corteza cerebral. En estos casos, tras la lesión se pierde toda la sensibilidad contralateral a la lesión, y se recupera el dolor, la temperatura y la sensibilidad epicrítica (burda). En la clínica está bien descrito este cuadro, conocido como síndrome talámico. En estos casos, el umbral de estimulación que producen estas sensaciones es elevado y las modalidades sensoriales son exageradas y displacenteras; además, se suelen acompañar

de una marcada respuesta afectiva, normalmente atribuible a la indemnidad del núcleo dorsomedial (frecuente en las lesiones vasculares). Las lesiones vasculares que afectan al territorio talámico posterolateral (núcleos ventroposterolateral, ventroposteromedial, cuerpo geniculado medial, pulvinar y centromediano) pueden

dar lugar a una pérdida sensorial contralateral, parestesias y dolor talámico. Ha sido bien descrito el síndrome de Dejerine y Roussy, caracterizado por un dolor intenso, persistente y paroxístico, a menudo intolerable, que se suele presentar en el momento de la lesión o después de un período de hemiparesia transitoria, hemiataxia y pérdida sensitiva hemicorporal. La participación del tálamo en el control motor queda reflejado por las aferencias procedentes de los núcleos grises de la base, el cerebelo y la corteza motora que llegan a él y las eferencias que de él parten hacia la corteza motora y premotora. En el sistema motor intervienen fundamentalmente los siguientes núcleos:

ventral anterior y lateral, intralaminares y reticulares; podemos destacar dos grandes sistemas: palidal y cerebeloso. La separación entre ambos circuitos se debe a que las aferencias son distintas y también sus eferencias hacia las áreas corticales a las que proyectan. Las alteraciones en las proyecciones del ventral lateral pueden dar lugar a trastornos motores (discinesias). Las lesiones en este núcleo disminuyen los movimientos anormales cerebelosos y de los núcleos grises de la base [6].

Las lesiones en el núcleo ventral intermedio (Vim), los núcleos ventrales caudales, el centromediano, los núcleos sensoriales y pulvinar pueden causar una gran variedad de alteraciones del

Movimiento, entre ellas distonías, temblor, balismo y corea [16-18].

 Las lesiones vasculares que afectan a los núcleos ventrales anteriores, lateral, dorsomedial y núcleo anterior pueden causar hemiparesia contralateral y trastornos de los campos visuales. nucleos grises de la base. Las venas cerebrales profundas de interés son la vena cerebral interna, la vena basal (de Rosenthal) y la gran vena cerebral de Galeno. Las venas cerebrales internas reciben las venas coroideas superiores (drenaje del plexo coroideo lateral), las del techo del ventrículo lateral (sustancia blanca profunda de los lóbulos frontales anterior y parietal posterior), las del asta posterior del ventrículo lateral (sustancia blanca de los lóbulos occipital y temporal posterior y fórnix) y las talámicas.

Éstas drenan en la vena cerebral interna a través de pequeñas venas talamoestriadas, que son las encargadas del drenaje del tálamo.

 

Existen evidencias de que los núcleos intralaminares también están implicados en el control de los movimientos. Estos núcleos reciben aferencias principalmente de la formación reticular,

del pálido, el putamen, los núcleos subtalámicos y las áreas corticales 6 y 4. Las conexiones que estos núcleos mantienen con el putamen y el caudado contribuyen al control motor subcortical.

El núcleo centromediano recibe aferencias del pálido, la sustancia negra (zona reticular), la zona incierta, los núcleos profundos del cerebelo, el córtex motor primario y los núcleos reticulares [19,20]. Envía amplias proyecciones glutamatérgicas excitatorias al putamen y proyecciones difusas al borde dorsolateral

del núcleo caudado y los núcleos subtalámicos [21,22]. Los núcleos reticulares talámicos terminan de manera

difusa en la corteza cerebral y permiten la activación necesaria para el correcto funcionamiento del sistema motor. Existen trabajos que señalan cierta implicación de los núcleos

de la línea media con el sistema motor. Lee y Marsden [17] señalan que las lesiones causantes de las distonías talámicas no hay que situarlas en los núcleos ventrales anterior y lateral, sino en zonas más posteriores o en los núcleos de la línea media. Podemos describir una semiología motora que caracterizaría

a las lesiones talámicas:

 – Alteraciones del sistema motor voluntario: descoordinación

cerebelosa contralateral, sincinesias homolaterales de imitación y contracturas.

– Alteraciones del sistema motor involuntario.

– Perturbaciones globales del movimiento: mano talámica,

caracterizada por movimientos incesantes de los dedos, tanto

en el plano horizontal como en el vertical.

– Alteraciones de la marcha [23].

 

Incidencia del Tálamo en los Procesos Psicofuncionales Superiores: Atención, Emoción, Lenguaje, Memoria

y Función Ejecutiva

El tálamo regula las funciones de la corteza asociativa y es importante en funciones como el lenguaje, el habla y las funciones cognitivas, mediadas por la corteza [24].

Existen tres regiones importantes de la corteza asociativa, parietotemporooccipital, prefrontal y límbica hacia las cuales proyectan diferentes núcleos talámicos. Así, la corteza parietotemporo occipital (áreas 39 y 40) está relacionada con las funciones perceptivas, la visión y la lectura y recibe información del pulvinar.

La corteza asociativa prefrontal es importante para la planificación de la conducta y los movimientos, la cognición, el aprendizaje, la memoria y el pensamiento. El núcleo dorsomedial proyecta sus fibras hacia esta zona cortical. Un estudio reciente que se realizó en monos, a los cuales se les hizo una ablación del núcleo dorsomedial, región magnocelular, ha puesto de manifiesto que las lesiones en esta zona talámica causan trastornos de la memoria debidos principalmente a la interrupción de la función entre este núcleo y el córtex prefrontal [25]. La corteza límbica, relacionada con el aprendizaje, la memoria y la emoción, recibe fundamentalmente aferencias del núcleo anterior talámico.

Tálamo y Ámbito Atencional.

La participación del tálamo y de la formación reticular en la regulación del nivel de arousal se puso de manifiesto ya en la

primera mitad del siglo XX con los trabajos pioneros que realizaron Morison y Dempsey [26], Jasper [27], y Moruzzi y Magoun

[28].

Los núcleos intralaminares están relacionados con la excitabilidad general de la corteza cerebral, al transmitir información procedente de la formación reticular mesencefálica a múltiples áreas corticales y al cuerpo estriado, y desempeñan un papel importante en el control del sueño y la vigilia. La estimulación

Eléctrica de estos núcleos provoca una activación generalizada de la corteza cerebral (recruiting response), que forma parte del sustrato anatómico del sistema reticular activador ascendente y, por tanto, de los mecanismos del sueño y la vigilia.

Los núcleos de la línea media parecen ser el lugar por el que el tálamo, junto con la formación reticular, controla las señales que acceden a la corteza cerebral. Los trabajos realizados

en este campo indican que el tálamo regula el grado de arousal cortical a través de las conexiones talamocorticales que se originan en los núcleos dorsomedial, intralaminares y de la línea media, y a través de las interacciones intratalámicas con los núcleos reticulares [19,29].

Los estudios llevados a cabo en diversas especies animales han proporcionado evidencias de que los núcleos reticulares están relacionados con el ciclo de sueño y vigilia [19,29]. Se ha comprobado que las neuronas gabérgicas de los núcleos reticulares controlan la actividad de las neuronas talamocorticales, y así modulan la actividad cortical [29,30].

En estudios realizados en seres humanos con técnicas de neuroimagen funcional se ha observado que existen variaciones en el flujo sanguíneo tálamico en función del grado de conciencia [31,32]. Kinomura et al [33] han demostrado cambios en el flujo sanguíneo de los núcleos intralaminares del tálamo y la formación reticular en función del nivel de arousal de sujeto.

En una investigación llevada a cabo por Fiset et al [34], donde se manipulaba el grado de conciencia de los sujetos utilizando Propofol – fármaco con propiedades anestésicas que disminuye el flujo sanguíneo cerebral, lo cual se acompaña de una

reducción del requerimiento metabólico cerebral de oxígeno y de la disminución de la presión intracraneal–, encontraron una relación negativa entre el flujo sanguíneo talámico (con PET) y la concentración de propofol que se utilizó. Los efectos de este anestésico son más pronunciados en la zona medial talámica, el giro cingulado, el giro orbitofrontal y el giro angular. Parece ser que las variaciones que se observaron en el tálamo (especialmente

en la zona medial) están significativamente relacionadas con la actividad de la formación reticular. Estos autores sugieren

que el sistema reticulotalámico desempeña un papel fundamental en la modulación de la conciencia.

En la clínica se ha observado que las lesiones vasculares en los núcleos intralaminares y dorsomediales pueden causar mutismo acinético y síndrome de Kleine-Levin (síndrome de hipersomnia y bulimia). Este síndrome se caracteriza por períodos recurrentes de excesiva somnolencia, hiperfagia, hipersexualidad y alteraciones de la memoria reciente. Diferentes aspectos de la atención pueden ser atribuibles al córtex prelímbico y al núcleo dorsomedial [35]. Los infartos talámicos pueden causar negligencia y déficit atencionales del espacio extrapersonal contralateral a la lesión [36-38].

Tálamo y emoción

Los principales núcleos implicados son el ventral anterior, el dorsomedial y el grupo nuclear anterior. El ventral anterior recibe aferencias desde el cuerpo mamilar y proyecta fibras hacia el

II CINI: SÍNDROMES NEUROPSICOLÓGICOS ESPECÍFICOS

REV NEUROL 2004; 38 (7): 687-693 691

Cíngulo. El núcleo dorsomedial recibe desde el hipotálamo y la amígdala y envía sus fibras hacia el lóbulo prefrontal. El dorsomedial, con sus proyecciones hasta la corteza prefrontal y las estructuras límbicas, participa en la integración de la información visceral con el afecto, las emociones y el pensamiento. El grupo anterior media información visual y emocional. La estimulación eléctrica y la ablación de este núcleo inducen cambios en la tesión arterial y los impulsos motivacionales.

Tálamo y lenguaje

Penfield y Roberts, en 1959 [39], fueron los primeros en destacar que el tálamo, con sus extensas proyecciones corticales, está relacionado con funciones lingüísticas.

En el lenguaje intervienen, fundamentalmente, el pulvinar, el grupo nuclear lateral (fundamentalmente el ventroposterolateral y el ventroposteromedial) y el grupo nuclear anterior. Existen conexiones recíprocas entre el pulvinar y la corteza cerebral importantes para el lenguaje y el pensamiento simbólico (hacia la encrucijada funcional parietotemporooccipital). El ventroposterolateral y ventroposteromedial participan en el lenguaje gracias a las relaciones que mantienen con áreas somestésicas y a la integración específica que en ellos se produce.

Existen evidencias electrofisiológicas de la participación del tálamo en los aspectos motores del lenguaje. Mateer [40] encontró un incremento en la duración de la respuesta verbal después de estimular el tálamo izquierdo, dando como resultado una mala pronunciación de las palabras y cambios articulatorios.

Posteriormente, Bhatnagar y Andy [41] observaron espasmos motores articulatorios tras la estimulación del núcleo centromedianoizquierdo.

Johnson y Ojemann [42] señalan que la zona ventrolateral del tálamo izquierdo (especialmente la parte central) participa en la integración de los mecanismos motores del habla, entre ellos la respiración, ya que tras la estimulación de esta zona talámica se observa una inhibición de la respiración, un enlentecimiento del habla y la presencia de perseveraciones.

El pulvinar no está sólo intercalado entre las vías óptica y acústica, sino que proyecta a zonas corticales importantes para el lenguaje y el pensamiento simbólico (encrucijada parietotemporooccipital).

Las lesiones en el núcleo anterior o en el pulvinar pueden causar anomia, parafasias semánticas y errores sintácticos [43]. Ojemann [44] encontró que, tras la estimulación de la zona anterior (parte más lateral) del tálamo, aparecen repeticiones de

palabras que previamente se han denominado correctamente. Si la estimulación se realizaba en la parte central de la zona ventrolateral, aparecían perseveraciones. La estimulación de la parte posterior de la zona ventrolateral y pulvinar anterior daba lugar a la aparición de omisiones y errores en la denominación

de objetos.

Tálamo y memoria

Parece ser que son los núcleos talámicos anteriores, los de la línea media, los dorsomediales y los núcleos talámicos intralaminares los implicados en los procesos de la memoria, aunque no existen evidencias concluyentes que indiquen cuál de estas estructuras es crucial para el buen funcionamiento de la memoria anterógrada [45].

Weiskrantz [46] señala que los déficit de memoria que suelen aparecer en los pacientes con lesiones talámicas son similares a los que se observan tras lesiones en el lóbulo temporal medial: déficit en la codificación de nueva información que dan como resultado una alteración en la memoria anterógrada, mientras que la memoria permanece intacta a corto plazo. Existen evidencias de alteraciones de la memoria tras lesiones talámicas específicas, en especial en el núcleo dorsomedial [47], el anterior [48, 49] y los núcleos intralaminares [50]. Parece ser que el núcleo anterior está relacionado con el proceso de consolidación de la información –permite la formación de trazos mnésicos– y con la memoria de trabajo [51].

Recientemente, Celerier et al [52] han demostrado en ratones que las lesiones en el núcleo anterior causan alteraciones en la ejecución de tareas de memoria. Según dichos autores, este grupo nuclear está relacionado con el mantenimiento de la información en el tiempo, independientemente de la naturaleza de la información, y con los procesos asociativos de la información unimodal y polimodal.

Los núcleos anteriores del tálamo están implicados en los procesos de organización temporal de la memoria [53]. Los núcleos intralaminares permiten la salida de trazos mnésicos ya memorizados, es decir, el proceso de activación. En los procesos de organización temporal de los recuerdos recientes y antiguos interviene el núcleo dorsomedial. Las lesiones en estos núcleos pueden dar lugar a una desorganización temporal del recuerdo que afectaría no sólo a la información  nueva, sino también a la antigua. Pueden aparecer fabulaciones, como las que se describen en el síndrome de Korsakoff. Victor et al [54] consideran en el 100% de los pacientes con síndrome de Korsakoff el núcleo dorsomedial está afectado, junto con los cuerpos mamilares. El déficit es más grave si están implicados el núcleo dorsomedial del tálamo y los núcleos de la línea media [55]. Además, en el síndrome de Korsakoff [56] se ha encontrado relación entre la amnesia anterógrada y el grado de atrofia en los núcleos de la línea media, sin que se evidenciara ninguna relación con la atrofia en los cuerpos mamilares, el hipocampo

o el giro parahipocampal. Gaffan y Parker [25], en un estudio realizado con monos, han encontrado que la parte magnocelular del núcleo dorsomedial desempeña un papel importante en la memoria. Una lesión en dicha zona da lugar a una alteración en esta función cognitiva atribuible a la desconexión con el córtex prefrontal. Sin embargo, y a pesar de estos resultados, todavía existe controversia sobre si las lesiones en el dorsomedial pueden causar déficit de memoria. En una extensa revisión que realizaron van der Werf et al [57], sobre los déficit neuropsicológicos que pueden aparecer tras los infartos talámicos, señalan que no existen evidencias suficientes para poder establecer la relación del dorsomedial

con los problemas de memoria que se producen después de lesiones diencefálicas. Concluyen que los déficit de

memoria que pueden aparecer y que son compatibles con un ‘síndrome amnésico’ dependen de la integridad del tracto mamilotalámico. La participación del tálamo en el procesamiento de la memoria se ha puesto también de manifiesto a través de estudios electrofisiológicos. Ojemann [44] encontró que la estimulación ventrolateral talámica afecta a la memoria verbal a corto plazo. La estimulación de esta zona durante la presentación del material que posteriormente será evocado reduce el número de errores. La estimulación del pulvinar izquierdo altera el procesamiento memorístico verbal, mientras que la estimulación del pulvinar derecho altera el procesamiento memorístico no verbal [42].

M.V. PEREA-BARTOLOMÉ, ET AL

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